María Esther Gilio

Alfredo Zitarrosa: “En toda canción están las huellas de un disfrute que existió” Una entrevista profunda para conocer aspectos íntimos que quizá pocos sabían sobre el grave cantautor: su pánico antes de salir al escenario, el desprecio por su voz, una neurosis que tanto él como la reportera identifican tan propia de Uruguay. Diálogo entre el "tú" y el "vos", acompañado por un cuento genial e inédito hasta el momento de esta publicación, en la Crisis #18 de la primera época.
Perón: un líder de la patria grande Dos ex presidentes latinoamericanos –Joao Goulart y Hernán Siles Zuazo- y cuatro destacadas figuras del peronismo –Sebastián Borro y Luis Monsalvo, dirigentes obreros, y Rodolfo Puiggrós y Arturo Sampay- recordaron la figura del general Perón para crisis.
Daniel Moyano: la música que brota de la tierra Con sus manos podía escribir grandes novelas, como Tres golpes de timbal, tocar el violín o construir una casa con ladrillos que traía el río en La Rioja, donde vivió muchos años. Reflexivo, cercano, sin aspaviento, el autor cuenta sus secretos y recuerda sus tardes con Jauretche en esta entrañable charla con María Esther Gilio publicada en la crisis #22.
Liv Ullmann: la linterna mágica de Bergman Liv Ullmann protagonizó nueve de las películas de Ingmar Bergman y además fue su pareja. En 1988, mientras filmaba en Argentina, le dio esta entrevista a María Ester Gilio, que la pinchó con preguntas sobre el rol de la mujer en el cine y la vida del director sueco. Ella respondió con una sensibilidad y lucidez que logra opacar el talento del realizador de “Persona”. Sexo, familia, escritura: respuestas que resplandecen en la crisis #66.
Onetti: “Para mi dulce condenación” Esta conversación que publicó la revista crisis #47 podría definirse como ritual: cuatro encuentros a lo largo de 15 años entre María Esther Gilio y Juan Carlos Onetti. El 30 de mayo se cumple un aniversario más de la muerte del autor de “Juntacadáveres” y aquí aparece con toda su indómita y ácida lucidez. Esas respuestas leídas hoy, dejan muchas veces una pregunta: ¿pasarían el filtro de la cultura de la cancelación?
Jorge Luis Borges: “Yo querría ser el hombre invisible” María Esther Gilio va al encuentro, esta vez, de Jorge Luis Borges. Y muestra los matices de ese entrevistado de expresión “vagamente feliz”. El resultado: un Borges niño jinete, algo machirulo, que ofrece respuestas de quien se sabe al descubierto. Con mucha actualidad, la charla pasea por la educación y las diferencias sociales en la infancia, los modos de pensar la ficción y la poesía. Salió en la crisis #13 y es de esos diálogos que no se sueltan hasta el final.
Héctor Tizón: mateando con el diablo y los muertos Un viernes por la mañana de 1974, en el día de los muertos, María Esther Gilio se bajó de un micro en Yala, junto a un ceibo grande, y enfiló para la casa del doctor Tizón. En un puñado de días, entre los dos tejieron esta charla publicada en la crisis #21 en la que el juez y escritor jujeño que murió en 2013 habla de fantasmas, de sentencias que son cuentos y encrucijadas y pistas, a la vez, para entender su obra literaria. Gilio, por su parte, logra una entrevista que es crónica afiebrada de la Puna, retrato de un escritor atravesado por el paisaje y reflexión de este género que manejaba como nadie.
Darcy Ribeiro: “Educar a los colonizados” En diciembre de 1986, en la crisis #49, se publicó este reportaje en el que María Esther Gilio deja ver otra vez la parte más genuina de sus entrevistados. En este caso, la charla fue con Darcy Ribeiro, en ese momento vicegobernador y secretario de Cultura de Río de Janeiro; un reconocido intelectual que desde ideas que mezclaban antropología, sociología y política trajo con desenfado y compromiso social una manera de pensar entre otras cosas, al Brasil, que llamaba "pueblo nuevo" celebrando el mestizaje, y a toda América Latina. En tiempos en los que avanza la derecha en su país, vale recordar a quien siempre apostó por la utopía.
troilo: “creo que soy un hombre bueno” Rápida para correrlo y a la vez bailar a su ritmo, en este diálogo publicado en septiembre de 1974, María Esther Gilio muestra a un Anibal Troilo que va y viene desde la memoria del mundo del tango a su amor por Zita, su compañera de toda la vida. Entre “te cuento” y “esto no lo pongas”, una charla en la que baja la guardia.
clarice lispector: «los libros son mis cachorros» En 1976, Eric Nepomuceno y María Esther Gilio tuvieron una tarea difícil: entrevistar a Clarice Lispector, que ya había revolucionado la narrativa brasileña y, se sabía, era un hueso duro de roer para dar respuestas. Cada uno con su impronta, los dos pudieron sacarle destellos sobre la displicencia con la que veía al establishment literario, los modos de ser madre y escritora, y las formas en los que se complace o no al lector.